Viena presenta a sus visitantes un montón de diferentes curiosidades y museos. Un precioso lugar para el descanso familiar será el parque de la ciudad Stadtpark. A principios del siglo 19 en este lugar se encontraban varias construcciones, que en 1860 fueron derribadas. El proyecto del parque elaboraron mejores arquitectores y jardineros, la inauguración del parque tuvo lugar en 1862. Uno de los más extraordinarios establecimientos culturales se considera el Museo de la criminalística (Kriminalmuseum), cuya inauguración tuvo lugar en 1991. Su exposición está dedicada a los delitos de alto perfil, cometidos en Viena los últimos cien años. Aquí se puede ver antiguas fotos, casos de delincuencia, armas de crimen. Una notable curiosidad arquitectónica se considera la iglesia Wiener Karlskirche, que actualmente perdió su destinación religiosa y se considera el museo. La arquitectura de la iglesia representa una incomparable combinación de tradiciones italianas, griegas e incluso japonesas, es realmente único edificio. A los apreciadores de arte hay que visitar la exposición de Salvador Dalí, el museo se ubica en uno de los edificios históricos, poco lejos de la plaza Yozerflatz. Además merece la pena visitar el Museo histórico (Historisches Museum der Stadt Wien),
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