1. Es mejor pasear por los barrios centrales de la ciudad a pie, porque la mayor parte de calles centrales está cerrada para el transporte y forma una zona peatonal. Los que planeen alquilar el coche deben tener en cuenta que es bastante difícil encontrar un lugar para aparcamiento.
2. En la ciudad es bastante desarrollado el sistema de transporte público, vosotros llegaráis facilmente en autobús hasta los más lejanos barrios. El coste de un viaje equivale a 1 Euro y medio, además se puede comprar un abono de transportes que funciona un día entero o una semana. Los billetes venden puestos especializados Bus Océane.
3. Funicular es otro remedio de transporte popular, él reune la parte superior y inferior de la ciudad. El funicular funciona todos los días de la semana salvo al domingo de las 7 y media de la mañana hasta las 7 y media de la noche. El coste de viaje es sólo 40 céntimos de Euro.
4. Un modo perfecto para ver curiosidades municipales es ir de paseo en vicicleta. En Harve funcionan muchos puestos de alquiler que ofrecen vicicletas para cualquier plazo necesario. El más popular puesto de alquiler se llama Vélocéane. Cuanto más largo término de alquiler de vicicleta, tanto más bajo el pago diario.
6. Las agencias de viaje os presentarán información sobre excursiones y actos culturales próximos. El precio de billetes en algunos museos depende de la temporada, por lo tanto es recomendable averiguarlo con anticipación.
7. No recomendamos a los turistas que salgan de paseo por los barrios lejanos de la ciudad sólos. Al contrario, la parte central de Harve se considera un lugar muy seguro. Por eso allí es posible pasear sin peligro incluso por las noches.
El paseo por establecimientos gastronómicos del Harve sin embargo complacerá a los apreciadores de cocina francesa. Igual los aficionados de otros corrientes culinarios sin dificultad … 
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9. Entre los turistas tienen popularidad reposterías “creperías”, donde se puede disfrutar de cocción fresca y ordenar comida a salida, si es necesario.
10. El más famoso recuerdo que prefieren comprar los turistas es queso de producción local. Los conocedores notan que él posee de sabor y aroma incomparable.
