Es una de las ciudades más viejas de la Polinesia Francesa, el centro administrativo Tahití. Literalmente se traduce como “el agua de la cesta”. Tiene un nombre así, porque esta región siempre ha sido fomentada muy bien en plan agricultural y cuando los europeos llegaron aquí, quedaron estupefactos al notar el nivel del desarrollo económico y relaciones sociales. En los últimos siglos Papeete sufrió mucho a causa de las catástrofes que llevaron a grandes destrucciones y muertes trágicas de miles de ciudadanos. En el año 1884 la ciudad fue dañada muchísimo por un incendio y en doce años por lluvias torrenciales. Hoy día Papeete es uno de los balnearios playeros más populares, una ciudad moderna, llena de curiosidades que predisponen a un reposo confortable. La parte central es la plaza Toata. Precisamente aquí tienen lugar los eventos culturales, conciertos y espectáculos. La capacidad es para unos miles de espectadores. Alrededor se ubican los edificios que pertenecen a la administración – el Palacio del Presidente, la Comisaría Suprema y otros. La plaza de Tarohoi es muy especial, aquí se sitúa la Asamblea Territorial y unos monumentos. La principal calle comercial se llama el Centro Vaima. Paseando por las tiendas y mercados Ud. podrá llegar a otro edificio remarcable que es la magnífica catedral Notre Dame Papeete, construida en el año 1875. La ciudad cuenta con varios jardines botánicos, los más populares son el jardín
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