Es un importante centro de transporte y de educación de Japón, una ciudad con gran patrimonio cultural y historia difícil. Fue fundada en 1889 y se consideraba como una región industrial importante. Durante la Segunda Guerra Mundial la ciudad fue completamente destruida y tuvo que ser reconstruida. Hoy en día, Okayama es un destino turístico muy atractivo, allí hay muchos edificios hermosos, centros culturales y de entretenimiento.
Uno de los edificios más hermosos es el Museo de Arte que contiene colecciones de pinturas de prominentes artistas japoneses. El edificio está situado en una pequeña colina y se parece a un templo antiguo, majestuoso y elegante. No menos notable es el Museo de Arte de Hayashibara. Además de la exposición de pinturas, varias salas del museo están dedicadas a las colecciones de muebles antiguos, arma blanca y trajes típicos. Muchos de los objetos expuestos fueron denominados tesoros nacionales.
Una interesante atracción histórica local es la antigua torre Tsukimi Yagura (vista de la luna) construida en el siglo XVI. Originalmente, la torre era parte de un gran complejo arquitectónico, que no se ha conservado hasta nuestros días. Los visitantes de la torre se les ofrece una actividad muy interesante: las damas aquí pueden probarse con un kimono de lujo, y se preparan hermosos trajes de samurai para los hombres. En esta antigua torre, puedes tener una gran sesión de fotos memorable.
En las proximidades de Okayama se encuentra el famoso centro de artesanía Bizen-yaki, que también se puede visitar como parte del recorrido. Aquí, los artesanos fabrican cerámica única según la tecnología antigua, que es la más antigua de Japón. Todos los visitantes del centro pueden observar el trabajo de los maestros e incluso comprar los productos que les gustan. La arcilla especial con una composición mineral única se utiliza para hacer utensilios, que es el principal secreto de alta calidad.
Muchos santuarios únicos se han conservado en la ciudad y sus alrededores, y uno de los más interesantes es el Santuario de Saijo Inari. Este templo fue fundado hace más de 1,200 años, y hoy es un gran complejo arquitectónico con varias zonas conmemorativas. Este templo tiene muchas características interesantes, algunas de sus partes fueron construidas sin el uso de ningún elemento de sujeción. La posición de enormes piedras apiladas entre sí ha permanecido sin cambios durante cientos de años. En una de las partes más remotas del templo, hay un pequeño manantial, cuyo agua se cree que es milagrosa.
Un recorrido por la Antigua Residencia de Samurai del Clan Ashimori promete ser informativo. Construido en las tradiciones clásicas, representa un valioso objeto arquitectónico. La residencia tiene una antigua casa de té, varias salas de almacenamiento, así como un magnífico jardín con muchas plantas raras.
Un lugar maravilloso para caminar es la Plaza Tottori, que se encuentra cerca de la estación de tren. Esta plaza es notable por el hecho de que junto a ella hay varios edificios antiguos interesantes de diferentes períodos. Aquí también puedes ver hermosos monumentos simbólicos. El reloj monumental adornado con una composición escultórica original es de particular interés.