Esta ciudad belga se hizo popular entre turistas hace relativamente poco tiempo. Mechelen se hizo famoso gracias al arte campanario, ciertas campanas hechas por maestros locales están instaladas en los templos más grandes de Moscú y San-Petersburgo. Aquí hay una antigua escuela de campaneros, llamada Het Shipke. En cuanto a los monumentos históricos y arquitectónicos se puede destacar la Catedral de San Rumbolt. Una de las torres es de 97 metros de alto. Para subir a la torre, hay que superar 514 peldaños. Desde el mirador se ven perfectamente los alrededores de Mechelen, cuando no está nublado se puede divisar los contornos de Amberes. El altar de la catedral está fabricado de mármol, el maestro estaba construyéndolo durante el año 1655. Si uno pasa a la parte que está detrás del altar, se puede ver los frescos antiguos, trípticos y esculturas creadas en los siglos XIV-XVI. El adorno más valioso de este santuario es el cuadro de Van Dyke llamado “Crucifixión del Cristo”. La cosa histórica más apreciada es el monumento a Margarita Austríaca que fue la tía de Carlo V. Bajo su dominio la ciudad se desarrollaba muy rápidamente. La continuación de la composición arquitectónica es el edificio del Ayuntamiento y el palacio de Margarita Austríaca. Estas construcciones combinan de una manera extraordinaria las tradiciones del estilo gótico y renacentista. Actualmente en el palacio se sitúa el Juzgado Municipal. La auténtica representación del
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